El relevamiento, realizado por la consultora Giacobbe & Asociados, muestra que más del 40% de los encuestados considera que la situación económica es el principal problema del país. Este dato refleja un cambio en las prioridades sociales, en un contexto marcado por la transición política, la volatilidad cambiaria y el impacto de las medidas fiscales.
Entre los factores que explican esta percepción se destacan el aumento de precios en productos básicos, la incertidumbre sobre el empleo, la caída del consumo y la dificultad para proyectar inversiones o gastos familiares. También influye la expectativa sobre el rumbo económico que tomará el nuevo gobierno, en medio de señales contradictorias y falta de definiciones concretas.
La encuesta revela además que la preocupación económica atraviesa todos los niveles socioeconómicos y regiones del país, con especial énfasis en sectores medios y bajos. En paralelo, se observa una caída en la confianza hacia las instituciones y una demanda creciente de medidas urgentes que estabilicen la situación.
Con estos resultados, el escenario político y social se presenta desafiante para las autoridades entrantes, que deberán enfrentar una ciudadanía cada vez más exigente y sensible a los efectos de la crisis. La economía, una vez más, se convierte en el eje central del debate público y en el termómetro del humor social argentino.