Ricardo Pesenti presidente de
COFA deja en evidencia las tensiones entre las políticas gubernamentales y la realidad del sector farmacéutico, un desafío que deberá enfrentarse con diálogo y colaboración, y explicó cómo los farmacéuticos deben adaptarse a las modificaciones introducidas por el Programa de Atención Médica Integral (
PAMI), especialmente tras la eliminación del plan
Vivir Mejor, que cubría al 100% ciertas moléculas esenciales para los jubilados. Según Pesenti, "ahora ese plan está dado de baja", lo que implica que muchos medicamentos que antes eran gratuitos ahora tienen un costo adicional para los afiliados.
"El jubilado que necesite seguir utilizando ese medicamento y quiera mantener la gratuidad va a tener que hacer un trámite de subsidio social al PAMI", señaló
Ricardo Pesenti, enfatizando que las farmacias no tienen control sobre estas decisiones, pero sí se ven involucradas en orientar a los pacientes sobre cómo proceder.
El titular de COFA también destacó en
Radio del Plata-93.9, que las farmacias tienen un acceso limitado a la información de las recetas, lo que las deja en una posición vulnerable. "Para la farmacia es bastante ciego. Nosotros cargamos el número de afiliado más el documento, y con eso sabemos si tiene recetas pendientes. Pero no podemos prever qué cubre PAMI hasta validar en el sistema", afirmó.
Uno de los temas centrales en la entrevista con el periodista
Gustavo Masa, fue el aumento de precios de los medicamentos y cómo este fenómeno ha afectado tanto a las farmacias como a los consumidores. Pesenti confirmó que en el último año las ventas han disminuido un 8% en promedio, alcanzando una caída del 20% en medicamentos de venta libre.
El dirigente también subrayó que las farmacias no son responsables de fijar los precios. "La farmacia no es formadora de precios, aplicamos los que determinan los laboratorios. Además, bonificamos parte de los costos para sostener los convenios con PAMI", aclaró.
Sin embargo, Pesenti advirtió que el sector no podría soportar más esfuerzos económicos. "Lo que no vamos a tolerar es que si el déficit sigue creciendo, se nos pida más sacrificios a los farmacéuticos", enfatizó, destacando que las farmacias ya están al límite de su capacidad para sostener la prestación.
"Es importante cuidar la sanidad del sistema porque alguien siempre termina pagando. Lo gratis para unos no lo es para otros" reflexionó. Pesenti, en un llamado a encontrar soluciones equilibradas que “beneficien a los jubilados sin sacrificar la estabilidad del sistema de salud” dijo en
La Mañana del Plata.
Sobre la regulación que permite la exhibición y venta de medicamentos de venta libre en supermercados y otros comercios, Pesenti expresó su rechazo categórico. Según él, esto pone en riesgo la salud pública al eliminar la supervisión profesional de los farmacéuticos.
Ricardo Pesenti dejó claro que el sector farmacéutico está comprometido con la salud de los argentinos, pero enfrenta desafíos significativos debido a las políticas de desregulación y los cambios en los subsidios. Mientras el gobierno busca equilibrar su presupuesto, las farmacias intentan adaptarse sin comprometer la calidad de la atención.
"No se puede tratar al medicamento como un bien de mercado. Esto ya se vivió en los años 90 y terminó con tragedias: medicamentos falsificados y precios elevados", recordó Pesenti. Además, argumentó que “la ausencia de controles adecuados en la conservación y administración de medicamentos fuera de las farmacias podría provocar consecuencias graves” finalizó.