En paralelo, el presidente de la Rural, Nicolás Pino, reclamó en su discurso una “señal clara” para liberar el potencial productivo del país. Sin menciones electorales, el mensaje fue político: el campo no quiere volver al pasado, pero tampoco puede esperar indefinidamente.
La presencia de Karina Milei y Luis Caputo reforzó el tono institucional del acto, mientras que la ausencia de Victoria Villarruel dejó entrever las tensiones dentro del oficialismo. El desfile de maquinaria y campeones cerró una jornada que, más allá de los anuncios, dejó una certeza: el campo sigue esperando algo más que gestos.