La paritaria de la Unión Obrera Metalúrgica finalmente fue homologada por el Gobierno nacional, dando cierre a un proceso que había generado fricciones entre el gremio, las cámaras empresarias y el Ministerio de Capital Humano. El acuerdo contempla un aumento salarial del 7,6% distribuido en cinco tramos mensuales entre abril y agosto, además del pago de cinco sumas fijas no remunerativas.
El convenio, rubricado el 4 de junio, establece incrementos del 3,3% en abril, 1,2% en mayo, 1,1% en junio, y dos cuotas del 1% en julio y agosto. A esto se suman pagos fijos de $30.000 en abril y $25.000 en cada uno de los meses siguientes.
La medida fue impulsada por entidades como ADIMRA, AFARTE, CAIAMA, FEDEHOGAR y AFAC, aunque la cámara pyme CAMIMA se abstuvo de firmar el acuerdo. Desde el gremio que conduce Abel Furlán, se destacó que el entendimiento busca recomponer parcialmente los ingresos de los trabajadores en un contexto de caída de la actividad industrial y fuerte presión inflacionaria.
La homologación llega en un momento clave, marcado por la desaceleración del consumo y el cierre de pymes. El acuerdo incluye cláusulas de revisión que podrían activarse después de agosto, en función de la evolución de los precios y el impacto en el salario real.