Los gobiernos de Córdoba y Santa Fe anunciaron nuevas iniciativas orientadas a disminuir la presión fiscal sobre sectores productivos y comerciales. La decisión se enmarca en un contexto de dificultades económicas y apunta a generar condiciones más favorables para la inversión y el empleo.
Entre las medidas se destacan la reducción de alícuotas en determinados tributos provinciales y la simplificación de trámites administrativos, con el objetivo de dar mayor previsibilidad a las empresas y aliviar los costos de funcionamiento. Autoridades locales remarcaron que la estrategia busca acompañar a las pymes, que representan el motor de la economía regional.
En Córdoba, el plan incluye beneficios para industrias y comercios que sostengan el empleo, mientras que en Santa Fe se trabaja en la actualización de regímenes impositivos para sectores estratégicos como el agro y la producción de bienes exportables. Ambas provincias coinciden en que la competitividad depende de un esquema tributario más equilibrado.
Los anuncios fueron bien recibidos por cámaras empresarias y entidades productivas, que ven en estas medidas un paso importante para sostener la actividad en medio de la crisis. Sin embargo, también advierten que será necesario mantener un diálogo constante para garantizar que los beneficios lleguen de manera efectiva a todos los sectores.