Marcos Daniel Fernández, condenado por el homicidio de la docente Betty Argañaraz en 2006, ha sido enviado nuevamente a prisión. La jueza Ana Cecilia Escobar ordenó su reclusión en el penal de Benjamín Paz debido a que Fernández no cumplió con la obligación de residir en el domicilio fijado como parte de su libertad condicional.
El Ministerio Público Fiscal, representado por Gonzalo García, había solicitado la revocación del beneficio desde julio de 2024, argumentando que Fernández vivía en El Cadillal junto a su pareja, Susana Acosta, también condenada por el crimen. A pesar de advertencias previas, Fernández continuó incumpliendo las reglas, lo que llevó a la decisión judicial de revocar su libertad condicional.
Durante la audiencia, Fernández justificó su residencia en El Cadillal alegando razones familiares y laborales, pero la jueza consideró que su actitud sostenida constituía un incumplimiento grave.
El caso de Betty Argañaraz sigue siendo un doloroso recuerdo para su familia, especialmente porque el paradero de su cuerpo aún es desconocido. Liliana Argañaraz, hermana de la víctima, volvió a pedirle a Fernández que revele la ubicación del cuerpo, pero no obtuvo respuesta.