Desde la finalización del brote en julio, no se han detectado nuevos contagios, lo que permite consolidar una etapa de control sostenido. Sin embargo, las autoridades sanitarias advierten que el riesgo persiste y que es clave mantener las acciones preventivas en los hogares, barrios y espacios públicos.
Luis Medina Ruiz, titular de la cartera sanitaria, destacó el trabajo articulado entre equipos técnicos, municipios y la comunidad. “La eliminación de criaderos es una tarea cotidiana. No podemos relajarnos, porque el mosquito sigue presente”, señaló.
En paralelo, se intensifican las tareas de monitoreo en zonas fronterizas y se prepara la estrategia para la próxima temporada estival, con énfasis en la detección temprana, el diagnóstico oportuno y la respuesta rápida ante posibles casos.
La ausencia de nuevos contagios es una buena noticia para el sistema de salud, pero también un llamado a sostener el compromiso ciudadano. El dengue, como enfermedad urbana, requiere de una vigilancia constante y de una participación activa para evitar su reaparición.