La humita tiene sus raíces en las tradiciones culinarias de los pueblos originarios andinos. Su nombre proviene del quechua "
", que hace referencia a una preparación sencilla de maíz molido utilizada en rituales y la vida cotidiana. Con el tiempo, los intercambios culturales entre las comunidades indígenas y la influencia de la colonización española enriquecieron este plato con nuevos ingredientes como el queso, la cebolla y especias que potenciaron su sabor.
Hoy en día, la humita se disfruta de múltiples maneras, ya sea en plato o envuelta en chala. Tucumán ha hecho de este plato un ícono gastronómico, en gran parte gracias a su geografía ideal para el cultivo del maíz y a la preservación de las tradiciones indígenas. Además, cada enero,
San Pedro de Colalao celebra la
Fiesta Provincial de la Humita, una festividad que homenajea este tesoro culinario y premia a los mejores cocineros.
Comer humita es mucho más que satisfacer el hambre: es una experiencia que conecta con el corazón de
Tucumán. Este plato, cargado de historia y tradición, es una invitación a descubrir el sabor auténtico de
los Andes en cada bocado. ¿Te animas a prepararla?.
La receta de la humita en olla
Si quieres saborear esta joya norteña en casa, aquí te dejamos la receta tradicional:
Ingredientes:
1 cucharada de aceite de girasol
1 cebolla grande
1 cucharada de pimentón
10 choclos rallados
800 g de zapallo criollo rallado
Sal, pimienta y azúcar a gusto
200 g de queso cuartirolo
Para el frito:
1 cucharada de aceite de girasol
1 cucharada de pimentón
3 cebollas de verdeo picadas
1 cucharadita de ají molido
Preparación:
1. Base:
En una olla grande, calienta el aceite de girasol y dora la cebolla picada. Agrega el pimentón, los choclos y el zapallo rallados. Cocina a fuego medio durante 30 minutos, revolviendo constantemente. Si es necesario, añade un poco de caldo o leche al final para ajustar la textura.
2. Frito:
En una sartén, calienta el aceite, agrega las cebollas de verdeo, el pimentón y el ají molido. Cocina hasta que las cebollas estén doradas y el aceite absorba todos los sabores.
3. Montaje:
Sirve la humita en cazuelas, coloca trozos de queso cuartirolo encima y decora con el frito de cebolla de verdeo. Disfrútala bien caliente.