Según el relevamiento en los 31 principales aglomerados urbanos, más de 1.136.000 personas buscaron trabajo sin éxito. Proyectado a nivel nacional, se estima que unas 1.807.000 personas están actualmente desocupadas.
El informe también muestra una caída en la tasa de empleo, que pasó del 45,7% al 44,4%, y una leve baja en la tasa de actividad, que se ubicó en 48,2%. Las regiones más afectadas fueron el Gran Buenos Aires, con un 9,1% de desempleo, y la región Pampeana, con un 7,4%. En contraste, la Patagonia registró la menor tasa, con un 4,9%.
El impacto es especialmente fuerte entre mujeres jóvenes: en el grupo de hasta 29 años, la desocupación trepó al 19,2%, mientras que entre los varones de esa franja etaria fue del 15,1%.
El dato marca un quiebre en la tendencia descendente que se venía registrando desde mediados de 2024 y refleja las dificultades del mercado laboral para absorber la demanda de empleo, incluso en un contexto de cierta reactivación económica. La situación genera preocupación entre analistas y gremios, que advierten sobre el riesgo de una mayor precarización.