El Consejo de Mayo se reúne una vez por mes y apunta a tener un documento final en diciembre, que sirva como base para proyectos legislativos en el nuevo Congreso. El Gobierno apuesta a que, tras las elecciones de octubre, podrá contar con una mayoría más favorable para aprobar las reformas.
Por ahora, el hermetismo domina la escena. Pero el relanzamiento del Consejo marca el inicio de una etapa decisiva para el plan de transformación institucional que Milei prometió en campaña.