El despliegue fue coordinado por el Ministerio Público Fiscal y contó con la participación de grupos tácticos, que intervinieron en simultáneo en distintos barrios de la ciudad. Como resultado, varias personas fueron detenidas y puestas a disposición de la Justicia, acusadas de integrar una red de venta ilegal de drogas.
Entre los elementos secuestrados se encontraron dosis de marihuana, cocaína, balanzas de precisión, teléfonos celulares y anotaciones que podrían aportar datos sobre la logística del negocio. También se incautó una suma considerable de dinero en efectivo, presuntamente producto de las transacciones.
Las autoridades destacaron que el operativo responde a denuncias vecinales y a tareas de inteligencia previas, que permitieron identificar puntos de venta y movimientos sospechosos. “La lucha contra el narcomenudeo es constante y requiere presencia territorial y articulación judicial”, señalaron desde la fuerza.
El caso refuerza la estrategia provincial de combate al tráfico de drogas en zonas urbanas y rurales, con foco en la prevención, el control y la contención social. La investigación continúa para determinar el alcance de la red y posibles vínculos con otros circuitos ilegales.