La iniciativa apunta a garantizar salida comercial para los ingenios tucumanos, que venían enfrentando dificultades para colocar su producción en el mercado nacional. La compra masiva por parte de Ledesma —uno de los principales actores del rubro en Argentina— permitirá estabilizar parte del stock y mejorar las condiciones de negociación para los productores locales.
Desde el Ejecutivo provincial se destacó que el convenio no solo tiene impacto económico, sino también social, ya que contribuye a sostener empleos y dinamizar las economías regionales. Además, se valoró la articulación público-privada como herramienta para enfrentar los desafíos del sector.
La operación se enmarca en un escenario complejo para la industria azucarera, con altos costos de producción, baja rentabilidad y competencia con productos importados. En ese contexto, el acuerdo con Ledesma aparece como un alivio y una señal de confianza en la calidad y capacidad de la producción tucumana.
El sector espera que esta compra marque el inicio de nuevas oportunidades comerciales y que se mantenga el diálogo entre empresas, gobierno y productores para asegurar la sustentabilidad de una actividad clave en el norte argentino.